Llega el momento de salir de viaje y te da miedo la reacción de tu mascota al conocer que no puede ir a su aire, debe viajar en un transportín.
Te vamos a dar algunos consejos para que este momento sea más llevadero.
- No te sientas mal, vale que a nadie le gusta que le metan en una jaula, vale que parecen cárceles… pero piensa que es un elemento más para la seguridad de tu animal durante el transporte. Si lo tomas como algo natural, incluso beneficioso para tu perro le transmitirás esa tranquilidad. ¿Sabes que muchos animales llegan a sentirse seguros dentro de la jaula?
- Conoces a tu mascota, sabes en qué punto está su límite de «agotamiento»… vamos a aprovechar ese momento en el que necesita descansar para presentarle su transportín, un lugar de descanso. Intenta que haga ejercicio antes de entrar al transportín, que llegue con poca energía y ganas de echar una siesta harán que el trago de entrar a la jaula sea más llevadero.
- Este consejo es muy obvio, pero asegúrate de que el sitio está limpio y perfecto para que tu animal esté cómodo dentro. Ten cuidado con objetos sueltos que puedan hacer daño a la mascota como collares o correas desatadas.
- Deja que el animal entre solo en el transportín, no le empujes. Tienes que tomarte todo el tiempo necesario para que esto sea posible; deja la puerta abierta. Después de un buen rato dentro, cuando el animal esté cómodo, ciérrala despacio. Que no note la intención de que entrara ahí, tenemos que lograr que piense que entró porque quiso. Al principio se tiene que familiarizar con el transportín, no tengas miedo si entra y sale, seguramente tenga curiosidad y vuelva.
- Sé positivo. No le digas frases tristes ni te despidas de tu mascota en el momento de empezar el viaje y separaros, no le puedes transmitir un sentimiento de tristeza porque probablemente se pondrá ansioso.
- Lo más probable es que no podáis realizar el viaje juntos, la mascota debe separarse de su dueño en la mayoría de transporte de mascotas. Ensaya esto con tu animal, déjalo en la jaula y vuelve a los 15-20 minutos a visitarlo, ábrele la puerta para que salga cuando le apetezca, juega con él y vuelve a dejarle solo, tiene que familiarizarse con el transportín.